Todas las semanas se registran al menos dos motos robadas en lugares públicos como los clubes o en la vereda de las viviendas. El colmo fue cuando se sustrajo una moto de 110 cc frente a la comisaría. Afortunadamente las cámaras alertaron de esta situación.
Lo cierto es que los hurtos y robos se dan a conocer por las redes sociales, algo que suele ser más efectivo que recurrir a las dependencias policiales. Las redes son inmediatas y tal vez eso ayude a recuperar los vehículos ante el alerta publicado.
Es increíble que no pueda controlarse esta ola de inseguridad. Hace varios años que el Foro de Seguridad no funciona porque no se lo convoca. La policía ya no es Comunal porque el ex intendente Claudio Rossi se desprendió de ella luego del femicidio de Úrsula Bahillo.
Mucho se habla acerca de los delincuentes y sus modus operandi: no serían de Rojas, es decir que vienen de distritos vecinos, donde se desarman las motos robadas. No debe ser tan difícil controlar las entradas y salidas de la ciudad. Solo que hay que hacerlo y para hacerlo hay que trabajar con los recursos disponibles.
Es preocupante la cantidad de motos robadas