Para el gobierno, la asistencia a la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) es de gran importancia, ya que el excanciller, Felipe Sola, hace varios meses estaba llevando adelante negociaciones para que Argentina asuma la presidencia pro tempore del organismo durante el 2022. Sin embargo, al enterarse de su despido no fue al encuentro y quedó Juan Valle, en representación de la Argentina. La alianza diplomática entre Argentina y México, responde a la necesidad de relanzar la CELAC para contrarrestar a la OEA (Organización de los Estados Americanos).
¿Por qué se busca reemplazar a la OEA? Las razones son varias, y entre ellas se encuentran la labor del Secretario General, Luis Almagro, para investigar las fraudulentas elecciones de Evo Morales en el 2019. Aunque para gran parte de la izquierda internacional, Almagro cooperó para que se realice un golpe de Estado al ex presidente de Bolivia Evo, hecho que es obviamente falso debido a las manifestaciones del pueblo boliviano contra un gobierno que acudió al fraude para intentar perpetuarse en el poder. Otra razón, es debido a la presencia de Canadá y Estado Unidos, donde este último fue acusado de llevar adelante golpes de estados en la región, en anteriores años. Por sí fuera poco, la OEA es una organismo internacional multilateral defensor de la democracia, esto se ve especialmente en la CARTA DEMOCRÁTICA INTERAMERICANA. Entre sus artículos se detalla que los países miembros de la OEA consideran cómo elementos de la democracia representativa:
- Los derechos humanos y las libertades individuales.
- El acceso al poder y su ejercicio con sujeción al estado de derecho.
- La realización de elecciones periódicas, libres, justas , basadas en el sufragio electoral y secreto.
- La presencia de un régimen plural de partidos.
- La separación e independencia de los poderes.
Cómo se puede apreciar, ninguno de estos puntos se estarían respetando en Nicaragua, Cuba y Venezuela. Es por ello, que tres presidentes manifestaron su postura contra estos gobiernos dictatoriales, en la cumbre de la CELAC…
El primero en diferenciarse fue el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso. En su discurso pronunció “Libertad para nuestros ciudadanos, para abrir nuevos mercados, para comerciar, soñar y crecer juntos en una plena democracia donde existan elecciones transparentes, donde se respete la libertad de expresión, donde se respeten los derechos humanos y las libertades políticas de los opositores a nuestros gobiernos”.
El siguiente mandatario fue aún más específico, este fue el presidente de Paraguay, Mario Abdo. El cual manifestó: “Mi presencia en esta cumbre, en ningún sentido ni circunstancia representa un reconocimiento al gobierno del señor Nicolás Maduro. No hay ningún cambio de postura de mi gobierno y creo que es de caballeros decirlo de frente”. Al momento de escuchar esto, el dictador Maduro le respondió: “Ni el mio con el tuyo”, haciendo referencia que su gobierno tampoco reconoce a Mario Abdo cómo presidente del Paraguay.
Por último, el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, atacó a todas las dictaduras de la región. “Participar de este foro no significa ser complaciente. Y con el respeto debido, cuando uno ve que en determinados países no hay una democracia plena, cuando no se respeta la separación de poderes, cuando se utiliza el aparato represor para callar las protestas, cuando se encarcelan opositores, cuando no se respetan los DDHH, nosotros en voz tranquila pero firme debemos decir con preocupación que vemos gravemente lo que ocurre en Cuba, Nicaragua y Venezuela”.
Maduro al escuchar esto se enfureció y expresó: “Le digo al presidente de Paraguay, ponga usted la fecha, el lugar y la hora para un debate sobre democracia”. El presidente de Venezuela, tiene pedido de captura por Estados Unidos y ofrecieron una recompensa de 15 millones de dólares para quien colabore en su arresto.
Siguiendo el debate, el presidente Diaz Canel le increpó a Lacalle Pou “La mención a Cuba que hizo de Lacalle denota su desconocimiento de la realidad, El coraje y la libertad del pueblo cubano se han demostrado durante seis décadas frente a la agresión y el bloqueo de Estados Unidos, obstáculo fundamental para avanzar más en nuestro desarrollo para lo cual el presidente de Lacalle no mencionó. Escuche usted a su pueblo que recogió más de 700 mil firmas contra la ley que usted impuso y que cambió las condiciones para ajustar precios de combustible, un paquetazo neoliberal”, expresó el dictador cubano con un nerviosismo presente en su alocución.
Cómo un hábil diplomático, el presidente de Uruguay le respondió “En mi país por suerte la oposición puede juntar firmas, en mi país por suerte la oposición tiene resortes democráticos para quejarse, es la gran diferencia con el régimen cubano y quiero citar simplemente y no son palabras mías, es una canción muy linda que quien es la cantan se sienten oprimidos por el gobierno: ‘que no siga corriendo la sangre por querer pensar diferente, ¿Quién les dijo que Cuba es de ustedes? si mi Cuba es de todos ustedes”.
La CELAC existe desde el 2010, y es un organismo internacional con un gran tinte de izquierda, ya que mantiene buenas relaciones con países con gobiernos de ese corte como Cuba, Venezuela y Nicaragua. A diferencia de la OEA, Estados Unidos y Canadá no están en la CELAC, ni Brasil, que se retiró en enero de 2020. Por lo que nada bueno puede esperarse de una organización que defiende dictadores, los cuales por medio de la cleptocracia saquean los recursos de su nación para gastarse el dinero en viajes y bienes exóticos, mientras sus poblaciones se mueren de hambre.