Este martes por la noche se llevó a cabo una charla sobre cooperativismo y economía social organizada por la Comisión de Relaciones Intercooperativas y contó con la disertación de Roberto Mandrino, integrante del plantel del Banco Credicoop.
Hubo participación de integrantes de varias entidades cooperativas y estudiantes de la Escuela Técnica. También se hicieron presentes el concejal del Frente de Todos, Miguel Quintana y el concejal electo de Unión por la Patria, Ramiro Baguear.
El gerente de la sucursal Rojas de la entidad crediticia y financiera, Javier Cura, indicó “queremos difundir los valores del cooperativismo, motivo por el cual hemos convocado a muchas cooperativas de Rojas y a estudiantes”.
Por su parte, el visitante comentó sobre la aplicación del cooperativismo en un contexto de capitalismo salvaje. “Las convicciones son más fuertes que las realidades, el cooperativismo nació de un momento hostil, creció y se desarrolló con hostilidad; con vientos de contra solemos ser más eficientes que con viento de cola; este es el desafío de plantear cuáles son los valores que el ser humano privilegia siempre si realmente tiene la orientación en el campo social: la solidaridad, el sentido común, un mundo más inclusivo, más participativo”.
Mandrino agregó “se tiene que aggiornar el cooperativismo, ya que sus pioneros tuvieron en cuenta en Rochdale que los principios básicos debían ser revisados cada 20 años porque ellos no podían condenar a la posteridad de sus seguidores a aplicar las recetas básicas e históricas cuando los tiempos podían ser cambiantes”.
Al término, el disertante sostuvo “muchas veces se dijo que el cooperativismo era una rueda de auxilio para cuando realmente no se podía funcionar con las ruedas del capitalismo; es un modelo de vida, es un modelo social y que en el mundo tiene alta difusión, prácticamente el 10% de la obra de mano en el mundo la aplican las cooperativas” y añadió “el capitalismo brinda siempre privilegios unidireccionales y no tiene en cuenta los privilegios de carácter social, porque de alguna manera el capitalismo es un antiderechos, es decir, una conquista individual a través de un sistema de meritocracia permanente”.
