La actual gestión de gobierno municipal anunció, a través del intendente Cristian Ford, la creación de la Oficina de Transparencia y, palabras del mandatario, se la iba a dar a sus “socios del PRO”, en el marco de la alianza entre el radicalismo y el macrismo a nivel local.
De este hecho se desprenden algunos interrogantes. El de más peso sugiere ¿la gestión de Claudio Rossi no fue transparente? y otro más ¿por qué ahora hay que demostrar que hay transparencia en la gestión pública, cuando se supone que es una de las virtudes que debe tener consigo un funcionario?
Si la gestión Rossi no fue transparente, ¿por qué el Concejo Deliberante no toma cartas en el asunto y hace una revisión de lo actuado por quien ahora detenta el cargo de diputado provincial?
Vale recordar que el ingeniero, que se jactaba de administrar el Municipio con superhábit, dejó una deuda de 157 millones de pesos, la cual ya se pagó durante este año, pero que nadie preguntó en qué los gastó durante un año electoral como fue el 2021, con elecciones que demandaba ‘un esfuerzo’ a nivel local y otro a nivel provincial para la banca en la legislatura bonaerense.
Volviendo al plano rojense, la Oficina de Transparencia iba a ser para los ‘amigos del PRO’, socios, esa fue la palabra utilizada por Ford. No obstante desde el macrismo vernáculo pusieron el grito en el cielo porque no reconocen al funcionario que ocupa esa cartera como integrante de las filas amarillas. “Mosqueira no es del PRO, nunca estuvo con nosotros”, dicen.
El comunicado del Municipio
“Una de las novedades en la gestión del Intendente Municipal Dr. Cristian Ford es la inclusión en su gobierno de la Dirección de Transparencia, cuyo Director es el Señor Mauricio Mosqueira y que ya está en funciones.
Su área contribuye no solo a una política de Transparencia que deben darse los estados locales, sino un insumo fundamental para la toma de decisiones democráticas de sus poblaciones.
Se creó la oficina para el libre acceso a la comunidad de la información pública en la página web (transparencia.rojas.gov.ar) y además cumpliendo así, con lo requerido por la Asociación Argentina de Presupuesto y la Administración Financiera Pública (ASAP), que propone realizar semestralmente en los meses de abril y octubre un monitoreo en sitios web oficiales, razonablemente accesibles, que permiten el seguimiento sistemático y la evaluación de la información fiscal y presupuestaria publicada por los municipios Bonaerenses.
A tal efecto y con el objeto de poder realizar una comparación entre las jurisdicciones municipales, el Indice de Transparencia y Visibilidad construido por ASAP pondera los diferentes requirimientos establecidos para este informe.
La metodología del presente relevamiento toma como base de referencia, entendiendo que guardan saludable relación con las mejores prácticas de gestión gubernamental y posibilitan el control ciudadano.
Los puntos a evaluar son: Presupuesto, situación económica financiera trimestral, ejecución presupuestaria (gastos y recursos) trimestral, ejecución de gastos según finalidad y función, stock de deuda pública actualizada trimestralmente.
Próximamente vamos a dar más detalles acerca de la actividad de la Oficina de Transparencia creada por la gestión del Intendente Municipal Dr. Cristian Ford”, finaliza el comunicado.
Conclusión
Entonces si la gestión pública, que administra el dinero de toda la ciudadanía, debe pretender granjearse de funcionarios íntegros, abiertos y transparentes en su gestión, volvemos al título de la nota: ¿Es necesaria una Oficina Municipal de Transparencia?
Lamentablemente hay que decir que en la pregunta está la respuesta.