La Cooperativa de Trabajo La Quince Ltda., ubicada en el barrio porteño de Villa Crespo, es un espacio cultural cooperativo que empezó su actividad en 2014 y logró obtener la matricula en 2017. “Somos un colectivo de artistas que abrió un espacio para poder presentarse y generar producciones”, contó su presidente, Martín Flax.
La Cooperativa La Quince también desarrolló una escuela de arte que funciona de lunes a viernes, un espacio gastronómico y despacho de bebidas, que funcionan los fines de semana junto a los espectáculos en vivo, que en general son de música, aunque hubo teatro.
Uno de los objetivos iniciales de la Cooperativa fue la formación artística. “Apenas abrimos, comenzamos a dar talleres porque es una forma de divulgar el arte popular y de que la comunidad participe de la generación artística, más allá del profesionalizarse o no, sino que el arte sea parte del cotidiano de todos y todas”, explicó Flax.
Quienes integran la Cooperativa La Quince tienen como prioridad divulgar el arte y enseñar. Por eso crearon la Escuela Popular de Arte (EPA) donde tienen una matrícula anual de 300 alumnos y alumnas con una propuesta formativas distribuida en 12 talleres.
“Muchos son de música, otros son de teatro de improvisación, capoeira. Por ejemplo, en el candombe son un grupo de 20 personas tocando el tambor y eso tiene todo un folclore. Después tenemos una comunidad africana que participa dando clases de danza y percusión”. Una vez por mes se realiza un encuentro comunitario con todas las personas que participan de los talleres.
Los talleres funcionan con una cooperadora, “antes teníamos un programa donde se podía generar una base salarial para los profesores, eso se fue achicando, se fue licuando y desapareciendo. Ahora cobramos una cooperadora”, aclaró el cooperativista. Si bien, hay personas que no pueden pagar, participan igual de los talleres. Con la cooperadora buscan generar una comunidad que pueda hacer sostenible el laburo y el acceso al arte y a la cultura.
“El trabajo de los compañeros y compañeras que dan las clases, lo hacen para construir este espacio comunitario para que el pueblo se pueda expresar”, resaltó Flax.
En total en la Cooperativa son entre 15 a 20 personas que trabajan en el espacio. En la parte de eventos, son alrededor de 10 y en los talleres unas 13, algunas se repiten en las dos áreas.
Cooperativismo-Cultura
Desde la visión del presidente de la Quince, como Cooperativa de trabajo cultural hay un doble desafío. “Uno es instalar la herramienta Cooperativa en el sector de la cultura que muchas veces ya funciona de forma asociativa con valores de la economía solidaria, pero hay un desconocimiento como herramienta institucional”, detalló.
Por otro lado, remarcó que tiene que haber una educación Cooperativa en el ámbito cultural, “para que vean al rubro de la cultura como una industria más, como un espacio de trabajo más. De a poquito vamos construyendo esos puentes entre cooperativismo y cultura”. En este camino de lucha, la Quince también se sumó a la Federación de Cooperativas Culturales de la Argentina Arde Ltda.
Finalmente, en la entrevista radial, el presidente de la Cooperativa reconoció que están atravesando un momento complejo. “De parte del gobierno nacional, hay una falta de fortalecimiento y de fomento, tanto para el cooperativismo como para la cultura que, si bien (antes) no te resolvían la vida, te ayudaba y ahora, en lo que puedan ponerte piedras en el camino, lo hacen, cuando la idea es que el Estado pueda fomentar la generación de trabajo y de identidad cultural. No nos vamos a doblegar”, definió.